He vuelto a pintar lo que nació en plena adolescencia, dónde fuerzas bruscas e ingenuas condujeron toda esta larga vida, hoy después de tanto navego entre mis pensamientos extraños ante mi propio sentimiento, rodeada de diversas situaciones cotidianas que me inspiran, con la facilidad de aquellos tiempos remotos, será aquel estrés estimulo neutro del olvido, o tan solo la falta de volver a creer en la luz que brillaba en mis ojos con cada reflejo vivo de cada línea por regalar fuese a quién fuese y a donde se dirija.
Sin embargo; he nacido para dar pausas, aquí estoy una vez más, a lo lejos o cerca del mismo lugar de siempre, con múltiples sentimientos que conduce una vez más a ser yo, y la facilidad que dirige extraños sentimientos de sobrevivencia, buscando ser y no ser la que un día gobernó los inicios de un sueño descubierto.
Hilda García Herrera...